PONENCIA DE ELDER JUAN ETCHEGARAY

Organización: Sr. RICARDO MÉNDEZ. Quisiéramos invitar a nuestro siguiente panelista ,Elder Juan Etchegaray, el Sr. Etchegaray es la autoridad máxima en el Uruguay de la Iglesia que hoy es anfitriona de este Foro. Indudablemente, decimos, que no solamente tenemos técnicos en materias muy puntuales que hoy nos convocan, pero hay otras que van muy unidas a estas y que tienen que ver con nuestro desarrollo. Como decía Amado Nervo, aquello de que... “somos arquitectos de nuestro propio destino”. Entonces, todo depende de que tipo de construcción hacemos en lo individual y cuanto colaboramos en lo social. Esto tiene mucho que ver con los valores, con las cosas que podemos ir incorporando dentro nuestro y a su vez ,como portadores de esos valores, podamos ayudar, colaborar con una sociedad que tiene problemas y conflictos muy graves . En este rol, los cristianos, tenemos un gran desafío. Es por eso, un gusto poder tener al Sr. Etchegaray con nosotros y poder aportar desde la visión cristiana a esos valores, a la familia, eso que decíamos hoy en el inicio, que es pilar básico de nuestra sociedad, no existe Estado sin las familias, estas son las que hacen el Estado.

SR. JUAN ETCHEGARAY.- Bueno, es una gran oportunidad para nosotros estar con Udes. en esta segunda etapa del Foro, agradecemos particularmente al Sr. Ricardo Méndez todo su esfuerzo en preparar este Foro, y los sueños que él ha tenido para poder llevar a cabo esta idea. Nos congratulamos también de que alguien de nuestra congregación, en alguna medida haya contribuido para animarle y bueno...es la realidad de lo que tenemos hoy día.
Estaba escuchando al Sr. Intendente en su introducción, pensando en que manera nosotros podríamos , como , o una expresión de religión aquí en Rocha, contribuir al Capítulo. Salud, Enseñanza y Desarrollo. Y nos gustaría hablar un poco acerca de las familias, del concepto que nosotros tenemos de la familia, como la gran escuela a la que todos hemos asistido y de la cual, después, nos constituimos en maestros y en rectores, con el paso de los años.
Yo estoy aquí en representación de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Mormones como nos llaman, esta denominación de Mormones no es ofensiva para nosotros, sino que responde a uno de nuestro Libros Canónicos, el Libro de Mormón. Así que cuando nos dicen Mormones, nos sentimos bien. Estamos en un edificio de la Iglesia , que con muchísimo gusto compartimos con la comunidad, no solo en esta oportunidad sino en otras situaciones. Tal como lo indica el nombre, somos cristianos, que estamos aquí desde 1947, nos sentimos y somos parte de este país. La Iglesia, aquí en Rocha está en mano de un liderazgo local y bueno, aquí adoptamos nuestra fé, criamos a nuestras familias, nuestros hijos, nuestros nietos y nos sentimos bien aquí. Sentimos que la religión no es un lugar para esconderse de muchas cosa que ocurren a nuestro alrededor. Es un lugar de trabajo, de compromiso, de defensa de los valores. En nuestro caso, particularmente, los valores cristianos. El presidente José Smith , el Primer Profeta de la Iglesia, dijo una cosa interesante, dijo que una religión que no requiere el sacrificio de sus miembros , no tiene el poder de ejercer la fé, para lograr la salvación u otros objetivos. Esto nos compromete con nuestras creencias y nos mantiene activos en ellos. O sea que, venir a la Iglesia no es exclusivamente participar de una reunión, sino es comprometerse, involucrarse en los problemas de nuestra gente y de las otras personas que nos rodean, en nuestra concepción de que todos somos hijos de Dios y consecuentemente hermanos. Quiero tranquilizarlos, no estoy aquí para predicarles, sino para compartir algunas ideas que podemos tener con Udes. Estamos aquí para trabajar con Udes., para escucharnos, para aconsejarnos y para construir juntos. Tengo la impresión de que nuestro anfitrión ha colocado una mesa, en el primer episodio del Foro y ahora a nosotros nos corresponde poner algo encima de esa mesa, para que permita alimentar y llevar a la realidad, como decía el Sr. Intendente, los aportes que todos nosotros tenemos, como fruto de nuestra experiencia de estar con la gente, de haber recibido una educación y de haber recibido valores, en nuestros hogares y también en nuestro país. Así que parafraseando un poco al Presidente Hinckley , que es el actual Presidente de la Iglesia, el suele decir: “traigan todo lo mejor que tienen, juntémoslo con lo nuestro, y veamos que podemos hacer , de nuevo y bueno, entre todos”. Y esa es la idea . Así que nosotros tenemos una la idea del valor y del cometido de la familia, cuando yo escuchaba el Relatorio que se hizo, del primer Foro, permanentemente, quizás condicionado por la presentación que estoy llevando acabo, permanentemente venía a mi mente el concepto de familia, familia, familia...como dijimos hace algunos momentos la gran universidad, la gran escuela, en donde nosotros podemos fijar estas ideas y estos sueños, porqué no. Entonces,...en lo que nosotros hacemos al menos, la familia es la unidad básica, mire... todo lo que nosotros hacemos, la predica, los misioneros, estos edificios, los materiales, todo tiene como centro fortalecer a la familia. Si fracasamos como familias,en realidad, todo lo demás no tiene sentido. Esto se sustenta, se apoya, en algo que nosotros creemos y nos gusta compartir con Udes. tenemos muy buena relación con todas las religiones, nos llevamos muy bien y nuestros amigos católicos, a quienes respetamos y tenemos un profundo afecto, yo me he educado en un colegio católico, a veces menciona el concepto de “hasta que la muerte nos separe”, respetamos esa posición; pero nosotros tenemos, quizás, una concepción un poco diferente, y yo la explico nó para plantear una discrepancia, sino para ilustrar un poco , porqué la familia es tan importante para nosotros. Nosotros nos casamos por la Ley de este país, vamos al Registro Civil, nos sacamos la foto, nos tiramos arroz...todo lo conocido, pero después, nos casamos también en un Templo, que es un edificio diferente a este, con un agregado interesante e importante para nosotros,<nos casamos por la eternidad>, basados en que creemos que las familias son eternas. Así que, piensen Udes. en sus propias familias, en los años, en las experiencias, dulces y amargas, que han vivido como matrimonios. En todo eso que han ido juntando en el correr de los años, y que tienen para compartirlo y para disfrutarlo, como también método de aprendizaje, para transferir a los hijos, eso, se termina abruptamente cuando la realidad de la muerte llega. ¿Es justo?. Yo creo que no, respeto todas las posiciones por supuesto, pero en realidad, el Dios a quién adoramos , es un Dios de amor y tanto que él es un ser eterno y nosotros consecuentemente somos sus hijos... heredamos de él esa calidad de vida. O sea que no todo termina aquí, cuando alguien deja de existir, en cuanto a esta vida, sino que creemos en las relaciones familiares eternas. Para nosotros, las familias son eternas, razón por la cual, entonces, yo quería señalar esto porque nos parece importante , fundamentar cual es la razón por la cual damos tanta importancia a este asunto de la familia. Para que quedara más claro , en el año 1995, la Iglesia produjo una Proclamación, no es un comunicado, son principios básicos, inclusive ahí en las mesas pueden tener algunas copias.
Algunas cosas importantes que dice esta proclamación: Todos fuimos creados a la imagen de Dios. Somos potencialmente dioses, obviamente con nuestras carencias y con nuestros defectos.
También declaramos que hay un plan de felicidad. El nacer no necesariamente determina que la persona tenga que sufrir, a veces el sufrimiento viene por consecuencia de las actitudes y de las decisiones que tomamos, pero, hay una posibilidad de ser feliz y creemos que esto es posible.
Algo interesante, decimos también que el primer mandamiento, que Dios le dio a Adán y Eva, fue el de ser esposos y padres, ahí ya el Creador marca una dirección. También que él, Dios, estableció la forma mediante la cual se crea la vida y esto es un concepto particularmente sagrado. También que los esposos deben amarse, deben cuidarse y consecuentemente hacer esto con sus hijos y no transferir esas responsabilidades a personas o instituciones. Es una asignación sagrada, indelegable. También declaramos que el matrimonio aprobado por Dios, es entre el hombre y la mujer; también advertimos que si no corregimos a tiempo, la desintegración de la familia, esto va a traer consecuencias graves para las comunidades, para las naciones.
A veces el gran peligro la destrucción de las naciones no está ni en los problemas económicos, ni en los problemas climáticos, ni en los enfrentamientos con otros países, sino en la destrucción de la familia. Algunas grandes civilizaciones han comenzado a caer cuando estas cosas se le fueron de las manos. Creemos que, promover todas las medidas que fortalezcan la familia van a ayudar para que las cosas que nos preocupan en este Foro y que se aplican a la realidad de Rocha,, puedan llevarse a cabo si podemos fortalecer el núcleo básico de todas estas cosas. Todos pertenecemos a una familia.
Así que damas y caballeros, nosotros creemos en esto. Creemos en valores los cuales, los enseñamos y nos esforzamos por hacerlo. No queremos decirles que no tenemos dificultades, porque eso sería negar la realidad, pero es interesante señalar que la Iglesia tiene un índice particularmente bajo de divorcios, particularmente bajo, pero los tenemos, y tenemos que arreglar algunas cosas dentro de nosotros mismos.
Ahora, algo interesante que ocurre también es que alguien podía pensar, bueno, esta gente vive metida en la iglesia, ¿saben una cosa?, estamos solamente tres horas por semana, en edificios como estos, venimos en la mañana nos reunimos, los niños por un lado, los jóvenes por otro, las mujeres por un lado, los varones por otro, después en la mitad de la mañana nos juntamos y después terminamos todos juntos. Y después nos vamos para casa; ¿por qué?, porque el hogar sigue siendo el centro, el núcleo de toda nuestra acción. Lo que recibimos aquí, lo llevamos y tratamos de canalizarlos para en el hogar. Ahora, ¿cómo lo hacemos?, y yo no estoy aquí para dar recetas, por supuesto, pero, miren, desde hace sesenta años venimos haciendo algo que nos enseñaron los profetas y le llamamos la Noche de Hogar. ¿Qué es la Noche de Hogar?; les voy a contar lo que hacemos en mi casa. Una vez a la semana, preferentemente los lunes, es un día un poco más tranquilo, nos reunimos mi esposa, los hijos y los nietos. Ahora los hijos se han casado estamos con mi esposa y algunos nietos nos vienen a ver y tenemos algunos hijos cerca, y durante una hora o cuarenta y cinco minutos tenemos una reunión familiar, en la cual, enseñamos valores, leemos alguna escritura por qué no, y tratamos temas de la familia. Tratamos la economía, cuando se puede y cuando no se puede gastar, y porque a veces hay que explicarle a los hijos por qué no se puede gastar. Hablamos de la educación, la marcha de los estudios de los chicos, hablamos del trabajo de los padres. Ellos tienen que saber, los hijos tienen que saber cuál es la realidad de la familia, como decíamos hace un momento, lo que se puede y lo que no se puede y cuándo sí y cuando no ,y cuando por qué sí y cuándo por qué no. También, hablamos de proyectos familiares, porque a veces nos juntamos para envasar tomates por ejemplo para guardar para la época en la que aumente el precio y es una actividad familiar. También hablamos de las tradiciones familiares y les contamos a nuestros hijos y tratamos de investigar un poco de dónde provenimos y qué hacemos aquí.
Ahora, lo interesante de esto es que no es una clase, es un encuentro familiar. Algunas veces en casa, es uno de los nietos el que dirige esta reunión y es una experiencia interesante que nos ayuda, como familia, a fortalecer nuestros lazos y a fortalecer particularmente el sentimiento de unidad familiar. Hemos adaptado esto, obviamente tenemos materiales que son adecuados y son para miembros de la iglesia pero hemos adaptado esto en un programa de desarrollo familiar, hay copias allí afuera, en un trabajo que lo desarrolló la Universidad de Brigham y la Universidad de Columbia, llevando este programa a familias que no son miembros de la Iglesia, no necesariamente tienen que serlo.
Y me gustaría citar un comentario de la Dra. Fullilove que dijo: “He llegado a creer que lo que aprendemos al practicar de la Noche de Hogar Familiar, son las habilidades necesarias para la supervivencia de las familias en tiempos difíciles”. Así que, este es nuestro aporte al Foro.
Quiero señalar también leyendo el Relatorio que se hizo y leyendo algunas publicaciones en la página de Internet, que apoyamos calurosamente la idea de la Semana de la Familia, nos encanta esa idea y puede ser un evento sumamente interesante y rico para el departamento. Quizás, porque es bueno soñar también el inicio de otras cosas, pero de pronto Rocha puede ser o llevar el estandarte de la Semana de la Familia, y que vengan gente de otros lugares a aprender y a contribuir y a traer, y todas las instituciones públicas, las instituciones privadas, los colegios profesionales, las iglesias, podamos contribuir y crear un polo en el cual la familia está siendo revalorizada como corresponde. Así que nos comprometemos a seguir dialogando y apoyar en esta dirección con acciones concretas.
Damas y caballeros esto es lo que queremos poner nosotros como nuestra contribución sobre esta mesa. Creemos que las familias son eternas y creemos que ningún éxito compensa el fracaso en el hogar; podremos lograr muchas cosas, pero si dentro de casa fracasamos, no tiene mucho sentido lo que hagamos. Muchas gracias por estar aquí. Buenos días. (Aplausos)”