La dimensión humana y las nuevas medidas
rochatotal//
Por Elena Grauert
Aunque resulte imposible recuperar todo lo perdido debido a la magnitud de la crisis sanitaria y económica, las medidas anunciadas por el gobierno de coalición son tan importantes como oportunas. Quizá el próximo paso sea atender las consecuencias emocionales, que también son relevantes.
Es evidente que estamos en una situación de excepción, y al igual que en el 2002, todos opinábamos sobre qué hacer, muchos gritaban “default” imitando a la política Argentina que los llevó al descalabro total, con consecuencias nefastas hasta la actualidad. Sin duda, en aquel momento primó el espíritu férreo de la racionalidad, de no abandonar el barco, sino el de comandarlo fuertemente luchando contra viento y marea. Seguir peleando era la consigna, confrontar al FMI y todos sus técnicos, y finalmente la solución vino, con costos altos, pero muchos menores de los que optaron por el “default”.
Hoy es diferente, ya que aquella era una profunda crisis económica internacional y esto es un virus que se expande, muta y nos perjudica doblemente en la salud y en lo económico. Es evidente que también en esta instancia se requiere una conducción firme, con dirección y con un compromiso férreo al acatamiento, al deber, a la norma jurídica. Ser lo suficientemente expertos y dúctiles en conjugar soluciones teniendo en cuenta todos los factores para ayudar a “palear el temporal” y tratar de que en el momento en que pueda haber una salida, estar prontos para poder dar ese empujón lo más rápido posible y salir. No es ciencia ficción, ya pasa y se hizo, basta ver las crónicas del 2005 en adelante donde se felicitaba por la salida de Uruguay de la crisis, con un crecimiento que en el 2005 llego a 6,8% del PBI, aunque evidentemente todavía existían las secuelas.
Las medidas de ayuda que propone el gobierno, sin duda son cautelosas, porque no se puede pedir mucho más cuando estamos en la mitad del camino. Se está invirtiendo en gasto social unos 900 millones de dólares que es el equivalente a lo que se gastó en Botnia, por tanto no puede decirse que es poco, sino que es muchísimo frente a cualquier hipótesis, más teniendo en cuenta la inestabilidad económica y de los mercados que está enfrentando el mundo entero.
Es evidente que muchos sectores están afectados, pero se entendió que los más urgidos son el turismo, alojamiento, gastronomía, agencias de viaje, free shops, transporte turístico, sector de fiestas y eventos, ferias y congresos, fotógrafos, sonidistas, iluminadores, DJ´s, taxistas, conductores de Uber, remises, rentadoras de autos, transporte fluvial y marítimo, transporte escolar, cantinas centros educativos, sector cultural, teatros, cines clubes deportivos y gimnasios.
Se resolvió exonerar el 100% de los aportes jubilatorios al BPS de enero a junio de 2021 y el IRAE mínimo mensual durante el primer semestre, además de exonerar anticipo del Impuesto al Patrimonio para el primer semestre del año.
Se establecieron sistemas de préstamos sin intereses, para una serie de sectores, así como acceso a créditos como el Sistema Nacional de Garantía, para todos esos sectores. También va a haber beneficios en tarifas públicas de UTE para los sectores de hotelería, gastronomía, instituciones culturales, agencias y salones de fiestas hasta junio, como también Antel exonerará de cargo fijo de línea telefónica y 25% en los cargos fijos de Internet para hoteles, locales gastronómicos, viajes y salones de fiesta.
El MIDES mantiene el Plan de Equidad, que se duplicará en mayo y en junio, pudiendo fraccionar el gasto mediante la aplicación TuApp. Además se anunció un subsidio a monotributistas Mides de 7.305 pesos por mes durante tres meses.
Por otra parte, se mantiene el seguro de paro flexible para trabajadores mensuales y jornaleros, lo cual permite aumentar la cantidad de gente que accede a dicho beneficio, con la ventaja de mantener la relación laboral y para los trabajadores informales queda disponible un subsidio temporal mensual de 7.305 pesos por tres meses, equivalente a dos canastas de alimentos que se darán a través de ANDE, a lo que se suma el apoyo a los monotributistas con un subsidio por el mismo monto.
Es evidente que las medidas no sirven para reparar las perdidas, en muchos sectores han sido muy grandes, son paliativos que se están dando para tratar de pasar el tiempo y lograr que fines de junio, julio, con una pandemia más controlada por el efecto vacuna, se pueda ir yendo a una reapertura que permita reabrir muchos de los lugares, tratando de aminorar las perdidas y volver a trabajar.
Las crisis siempre nos colocan en disyuntivas, decir que se hace todo bien sería un dislate, nadie hace todo bien, todos los que hacen se equivocan es parte de vivir, sí creo que en realidad cada uno de los que está al frente en la conducción del gobierno, están haciendo hasta lo imposible para salir de esta situación con el menor daño posible, pero claramente todos pagamos los costos de esto, no solamente económicos, sino humanos, que quizás sean los más importantes.
Hace tres meses no creíamos vivir perdidas de amigos, familiares o conocidos como lo que hemos vivido y claramente lo económico pesa, pero las consecuencias psicológicas tendremos que ser más sabios para afrontarlas porque son grandes e invisibles, quizás su atención deberían de ser las próximas medidas.
