No respires….

rochatotal

Por Dr. Daniel Chirico Costoya

Una de las mejores películas de suspenso dirigida por el uruguayo Fede Álvarez nos sirve de antesala, al patíbulo, al destino a la realidad.

Los populismos en América Latina, tan enhiestos, tan campantes tan descorteces,  en este maltrecho continente que  los ha tomado como su marca registrada, que pensar en alguna nación sin ningún exponente encaramado en la primera línea es casi una inocentada.

Nuestra vida, nuestro mundo son un continuum de sucesos que nos van moldeando, que nos tuercen, nos empujan nos frenan y contra ellos nuestra voluntad y o la razón  y ahí vamos.

América tan rica y tan triste, tan víctima y tan responsable de su propio destino, continúa en los cuartos de hora de los voluntarismos facilistas, echando culpas a todo aquel que una vez estuvo pero que ya ni quiere ni puede estar, invadida en silencio por otros más silenciosos, más astutos tiene un aquelarre en el patio trasero de Trump que ni el Covid lo hubiera pensado mejor.

Los líderes populistas del pelo que sean confunden gobernar con una campaña política y entre tantos arrebatos la realidad es culpable de no entenderlos y el mundo es responsable tal vez por lo que no piensan, desde Trump, hasta Ortega y Maduro, pasando por AndrésLópez Obrador y llegando a la esquina de la mitad oriental del sud continente.

Los analistas coinciden en que Brasil, tenía un problema heredado, otro regalo cortesía china y ahora tiene uno comprado que condiciona a todo el resto. Bolsonaro contra todos y contra todo, un día discutiendo con un ministro otro también y luego renuncias y problemas que se acumulan y mirando en puntas de  pie desde la ventana un niño bien vestido de padres pobres llamado Uruguay, temeroso de que se abra la puerta.

El país norteño comienza a transitar su peor momento de pandemia y entender su Presidente tal vez no alcance para justificar las formas con las que a veces describa la realidad o la intente modificar, enfermedades endémicas de larga data, desnutrición, narcotráfico son la tarjeta de presentación de un país al que e el mandatario pide que no se detenga, el virus mata pero dura menos que el hambre.

Pandemia y Hambruna son dos viejos conocidos de la historia del Mundo, desde nuestra esquina , sabemos que la tos de mi vecino puede ser mi neumonía, olvidarse que nuestras fronteras son tan permeables como nuestros estados de ánimo debe hacernos reflexionar.

Continuemos en el camino trazado para que la puerta trasera no sea nuestro problema y nos encontremos con una tarjeta de invitación a una fiesta que no queremos ser asistir, mientras tanto el mundo gira,  mientras lees mi columna reflexiona y no respires….

daniel.chirico@hotmail.com