Dip.Gerardo Nuñez PCU,renuncio y pidió subsidio
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Echando mano al “Acto Institucional Número 9”
Hace pocas horas atrás, el frenteamplista Gerardo Núñez presentó su renuncia a la banca en Diputados. Su salida había sido acordada ya hace más de un mes, con la directiva del Partido Comunista del Uruguay (PCU).
Este sector político venía de otro insuceso en el período anterior, luego del impacto mediático de ingresar al senado, por ese sector, la figura de Michelle Suárez Bértora (fallecida el año pasado) , con la bandera de ser la primera senadora trans del Uruguay.
Suárez, redactora de la Ley de Matrimonio Igualitario, un símbolo de la lucha por los derechos de la comunidad LGBTIQ tuvo denuncias en su profesión particular , comprometiendo al PCU y tuvo que abandonar la banca. En 2018 se le suspendió el título de abogada y en 2019 fue condenada a dos años de prisión domiciliaria y dos de libertad vigilada, a raíz de cinco delitos de falsificación de firmas en reiteración real con dos delitos de estafa y uno de falso testimonio.
Ahora, después de casi 13 meses que el diputado Núñez pidió licencia a la banca y no volvió a concurrir a una sesión parlamentaria ( cobrando él y su suplente), otro tema judicial golpea a la puerta del sector. Antes denuncias realizadas de violencia de género, cerrados los dos casos judiciales en los que estaba involucrado, hoy no tiene ninguna medida ni causa judicial pendiente, hora presentó la nota de renuncia a su banca ante la Cámara( sin que se sintieran apoyos). Núñez al parecer vivió en carne propia lo que el mismo voto con la legislación referida a violencia de género y los problemas que se han creado en muchas situaciones. El ahora exlegislador expresó en notas que no quiere victimizarse pero dejó traslucir su molestia, “existen herramientas legales muy valiosas que se conquistaron y deben ser protegidas. Sin embargo, algunas veces cuando se producen manejos espurios de las mismas, lo que se hace es dinamitar los avances que protegen a las personas en situación de violencia, aumentando el descreimiento respecto a dichos instrumentos”. Habría que rever la ley entonces.
Pero además de la renuncia vino una segunda solicitud, en la misiva que envió al Parlamento solicitó que se le otorgue el subsidio correspondiente, amparándose en el artículo 77 de la Constitución; Núñez, hay que ver no completó el período, pero el inciso 10 lo ampara por la votación de sus colegas con un quórum de 3/5 de votos que puede dar una excepción y tuvo 66 en 72 presentes que apoyaron.
La curiosidad , vaya paradoja (como decía Horacio Buscaglia) , es que el diputado renunciante se apoya en el fondo en el “Acto Institucional Número 9”,( hay que recordar que el PCU,en su momento, apoyaron el ”Golpe a la peruana”) esto viene desde la dictadura, que creó una cantidad de jubilaciones especiales para los gobiernos militares de la época. Pero los gobiernos de la democracia, en vez de derogarlos, se prendieron y empezaron a beneficiar a los políticos. Legisladores, ministros, secretarios y prosecretarios de la Presidencia, ministros de la Corte Electoral, de la Corte de Justicia, el Tribunal de Cuentas, o sea, decenas de personas se benefician de ese artículo que fue modificado por otra ley e implica que durante un año(antes era tres), desde que pierden el cargo, tienen derecho a cobrar el 85% del sueldo”. En definitiva el renunciante cobrara otro año sin trabajar como legislador; la solicitud fue aprobada por mayoría (66/72), con excepción de Cabildo Abierto y el Peri.
Foto El Espectador.