Socialistas piden la renuncia de Civila tras el pobrísimo desempeño electoral

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La escasísima adhesión que recogió el secretario general del Partido Socialista en las elecciones para presidente del Frente Amplio ,( por debajo incluso de los votos en blanco)llevó a que un grupo de dirigentes solicite que dé un paso al costado.

 La arrolladora victoria de Fernando Pereira en las elecciones para presidir el Frente Amplio empezó a generar las primeras fisuras en la interna de los sectores derrotados, especialmente en el Partido Socialista, que trató de jugar fuerte presentando la candidatura de su secretario general, Gonzalo Civila.

Escrutado el 80% de los casi 130.000 votos, Pereira, que fuera apoyado por los sectores mayoritarios de la coalición de izquierda -PCU, MPP, Convocatoria Seregnista-Progesistas- obtenía una amplia mayoría cercana al 70%, relegando a Civila a un magro 10%, por debajo incluso del número de votos en blanco.

Según da cuenta el semanario Búsqueda, en una reunión de evaluación del Comité Central del Partido Socialista, realizada vía Zoom, varios representantes del interior reclamaron la salida de Civila, que llegó a la secretaría general respaldado fuertemente por la departamental de Montevideo, dominada por los sectores más ortodoxos.

El exsecretario general Yerú Pardiñas fue uno de los que cargó las tintas sobre Civila, de acuerdo a Búsqueda.

El PS tiene previsto para 2022 su congreso y elección de autoridades, pero ante esta debacle electoral ya comenzaron a aparecer voces que reclaman la renuncia de Civila y el adelantamiento de las elecciones.

Ortodoxos y renovadores viven una permanente tensión en la interna socialista, que tuvo su máxima expresión recientemente en las últimas elecciones departamentales de Montevideo, donde el Partido resolvió apoyar la candidatura de Carolina Cosse, en detrimento de intento reeleccionista de Daniel Martínez.

Cuando Civila y su equipo más cercano resolvieron que en lugar de apoyar a Pereira sería parte de la competencia electoral, varios dirigentes socialistas plantearon que era un error.

Civila, que si bien calculaba que no tenía chances de derrotar a Pereira, esperaba que su candidatura arrastrara una buena votación de la lista 90 del PS, pero apenas obtuvieron un 8% de los votos, bastante por debajo de 2016, cuando apoyando a Javier Miranda llegaron al 12%.

La apuesta de Civila era que su candidatura apalancara una buena votación de la Lista 90 del Partido Socialista. Esa apuesta no salió bien y el sector también votó por debajo de sus expectativas, ya que obtuvo 6.013 sufragios -8,04% entre los demás sectores-. El resultado es inferior al que obtuvieron los socialistas en 2016 cuando, apoyando la candidatura de Javier Miranda, superaron el 12% de los votos.

En el entorno de Civila lo exculpan de la derrota y atribuyen gran parte del fiasco a que figuras socialistas de relieve se negaron a integrar la lista, y citan el caso de los tres exsecretarios Mónica Xavier, Yerú Pardiñas y Eduardo Fernández.

En la reunión del Comité Central, informa Búsqueda, Pardiñas aseguró que “la conducción” del Partido Socialista debía “asumir la responsabilidad” por los resultados, y otro de los que criticó a Civila fue el secretario político de Colonia, Michael Skafar, que, de acuerdo a las fuentes, dijo que las autoridades actuales “deben dar un paso al costado”.